Ibiza es sinónimo de sol, playa y fiesta, pero la isla tiene mucho que ofrecernos. Además de poder disfrutar de atardeceres que no se te borrarán de la retina, del precioso casco histórico de su capital o de comprar en sus mercadillos, aquí te dejo 5 planes alternativos para que descubras la isla blanca.
Visita la Cova de Can Marçà
En el norte de la isla, a tan solo 20 km de la ciudad de Ibiza, se encuentra Can Marçà. Es una cueva que tiene más de 100.000 años de antigüedad y que se encuentra ubicada en el interior de un acantilado del Port de Sant Miquel.
La visita se divide en dos partes, por un lado el paseo por el exterior de los acantilados, y por otro el interior de la cueva. En esa visita atravesaremos varias salas, donde veremos estalactitas y estalagmitas formadas por la acción del agua hace muchísimos años. En la Sala de la Cascada hay un espectáculo de agua, luz y sonido.
Cova de Can Marçà
Buceo
En Ibiza puedes bucear durante todo el año debido a su óptima climatología. La temperatura del agua oscila entre los 14º y los 28º C. Hay una fauna muy variada: barracudas, sargos, morenas, langostas, etc. Y abundantes praderas de posidonia, coralinas y esponjas.
Además, existen muchos lugares curiosos donde hacerlo. Uno de ellos es en el Don Pedro, el pecio buceable más grande de Europa, que se encuentra a una profundidad mínima de 27 metros y máxima de 46 metros. El 11 de julio de 2007, el buque mercante zarpó desde Ibiza con destino a Valencia cuando por un error chocó a una milla contra unos islotes, Els Daus. El agua entró rápidamente y el buque se hundió. Todas las personas que iban a bordo sobrevivieron. Ahora puedes verlo, pero para ello tienes que tener la experiencia de un mínimo de 30 inmersiones.
Otro de los lugares curiosos para bucear es en un faro hundido en la costa este de Ibiza, en el arrecife de Santa Eulalia. En realidad no es un faro, sino que era una baliza luminosa que advertía a los barcos de un posible peligro. Los temporales hicieron que acabara en el fondo del mar.
Pasear por Ses Salines
Ses Salines es la playa más conocida de Ibiza por sus aguas de color turquesa, sus dunas y sus diminutas calas con rocas talladas. Artistas anónimos han dejado sus obras grabadas en las piedras areniscas de esta zona. El más conocido es un monolito que está minuciosamente tallado con varios dibujos étnicos y tribales. En ellos podemos distinguir figuras humanas, esqueletos y hasta un grabado de estilo maya.
Roca tallada
Ruta por los faros de Ibiza
Los faros tienen algo que a todos nos llama la atención. Guías de los marineros, eran salvavidas para que llegaran a salvo a tierra. En Ibiza en la mayoría de ellos vivían los fareros, un oficio solitario.
En la isla podemos encontrarnos una gran variedad de faros: el más alto es el Faro des Moscarter, en el Faro de Ses Coves Blanques puedes visitar un museo y también hay faros a los que sólo se puede acceder en barco.
Faro Ibiza
Torre del Savinar
Situada en lo alto de unos acantilados se terminó de construir en 1756. También se la conoce como la Torre del Pirata, ya que aparecen en la novela Los muertos mandan del escritor Vicente Blasco Ibáñez. Su protagonista vivía en ella.
Desde esta atalaya de vigilancia tendrás unas vistas impresionantes al entorno de la Reserva Natural de Cala d´Hort y los islotes de Es Vedrà y Es Vedrenell. Es el lugar perfecto para ver el atardecer.
Torre del Savinar
Dónde alojarse en Ibiza
En Ibiza hay opciones para todos los gustos: hoteles, apartamentos, casas vacacionales y otra opción que a mí me gusta más, los aparthoteles. En ellos tienes la comodidad de un hotel y la autonomía de un apartamento. Es una buena opción para familias con niños pequeños.